Acabando el aste nagusia, una de las aste nagusia más mojadas que se recuerdan, pero la cosa fue a peor.
El Mercado de la Ribera incomunicado:
Las txoznas a pie del abismo:
Y cuando el agua y el barro se retiraron apareció lo peor:
Calles enteras anegadas, hubo muertos, escasez de agua potable, heridos, miles de traslados, cerraron negocios para siempre...
Y hasta lo más cotidiano se convirtió en epopeya:
Me llama la atención la cantidad de coches que pudieron arrastrar las aguas:
Pero lo más importante es lo que no sale en estas fotos. Miles de personas que incluso habiendo perdido un ser querido o todo su hogar, ayudaban a los demás. Ese es el ESPÍRITU DE BILBAO. El que aún en una de las peores situaciones, olvida lo malo y como dice la canción "lepoan hartu eta segi aurrera" (Echártelo en la espalda y seguir adelante.)Dentro de poco se cumplirán el 25 aniversario de esta catástrofe. Un recuerdo para todos aquellos que, aunque yo siendo pequeño y en la comodidad de Valle de Trapaga, donde no lo vivimos tan intensamente; ayudaron al de al lado sin importar raza, sexo o religión.
En esta dirección teneis un seguimiento muy amplio de este aniversario, de fotografías, de vivencias...
No hay comentarios:
Publicar un comentario